Shellac: Tu esmalte de uñas por excelencia.
Shellac se ha hecho hueco en el mundo de la manicura y es posible que ya hayas escuchado hablar de él. Sino es el caso no te preocupes, te contaremos todo lo que debes saber acerca de esta marca.
Esmalte Shellac.
Debemos empezar mencionando a su creadora Jan Arnold, cuya personalidad reforzó la idea exitosa de Shellac. Su confianza en si misma hizo que pudiera luchar por sus sueños y traernos hoy su producto.
La calidad resalta desde su primera pincelada sobre nuestra uña gracias a la combinación de monómeros y polímeros que consiguen un resultado de brillos impactantes con una larga duración. Sin dejar atrás su fácil eliminación.
Podrás disfrutar de unas uñas radiantes, con unas texturas lisas y con un grosor totalmente natural.
Las ventajas de Shellac.
Está claro que con todo lo que hemos mencionado sobre este producto, las ventajas son más que obvias. Pero no podemos dejar de recalcar que la mayor ventaja que podemos obtener de Shellac es su impresionante acabado, de brillo extremo (el doble que un esmalte regular) y su duración de hasta dos semanas en manos y de ocho semanas en pies.
Su olor no es para nada fuerte, su capa tampoco es gruesa como el gel y se remueve fácilmente, en tan solo diez minutos. Eso sí, siempre recomendamos que la eliminación de este esmalte se realice en nuestro salón, con la experiencia de nuestras profesionales. Ya que sino sabes retirarlo, la acetona secará tus manos e irá adelgazando la uña con el uso, ¡ten cuidado!
Su secado también es rápido gracias a la ayuda de las lamparas UV.
Lo mejor de todo tras conocer todas las ventajas de Shellac, es que no podíamos acabar sin añadir que tras todo el proceso de esmaltado y eliminación del mismo, tu uña no sufrirá en absoluto. Genial ¿verdad?
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